Si yo te preguntara… ¿te consideras una persona con buena salud? ¿Cómo te encuentras, en líneas generales?
Seguramente, si eres de las personas que les gusta cuidarse un poco, me contestarás que tienes buena salud y que, por lo generales, te encuentras bien. Alguna que otra cosilla, pero vamos, nada de importancia.
Quizá tienes un poco de estrés y, en ocasiones, duermes mal o tienes algún que otro dolor, ya sea de espalda, de cabeza o articular, por ejemplo. Puede ser, además, que en alguna ocasión sientas que comes en exceso, con ansiedad, y que, en otras, debas saltarte alguna comida para poder terminar todo lo que tienes entre manos.
Otra posibilidad es que sientas que tus digestiones son algo pesadas, o que tienes hinchazón abdominal, o gases, o que retienes líquido, que tengas épocas en las que tengas algo de estreñimiento, o, por el contrario, vayas más frecuentemente al baño y con heces más sueltas…
Así podría seguir enumerando un sinfín de pequeñas sintomatologías, que, aunque nos incomodan en el día a día, como no son, ni mucho menos, de gran importancia, hemos llegado a normalizarlas. Llega un momento que damos por hecho que son parte de nuestra esencia o naturaleza innata, que siempre hemos sido así, y ¡qué le vamos a hacer!
¿Estoy en lo cierto? ¿Te sientes identificado/a con esto que estoy diciendo?
También pudiera ser que estés en un momento en el que te sientes mal, sabes que antes tú no eras así, que tu esencia no tiene nada que ver con los síntomas que tienes actualmente, pero que la vida, por un montón de razones, te ha llevado a sufrir de obesidad, ansiedad, insomnio o un millón de enfermedades, que están actualmente muy presentes dentro de la sociedad. Es muy triste decirlo, pero cada vez, con más frecuencia.
Y entonces, ¿qué? ¿te vas a poner manos a la obra para sentirte mejor? ¿O vas a seguir como hasta ahora, lidiando con el día a día, bien porque no sabes cómo solucionarlo o porque requiere de ciertos esfuerzos que no te apetece hacer actualmente?
Cómo entablar una comunicación activa con nuestro cuerpo.
En cualquier de los casos, tengas pequeñas sintomatologías o ya hayas desarrollado alguna patología concreta, sientas lo que estés sintiendo, debes darte cuenta que son llamadas de atención que tu propio cuerpo te está dando. Hay algo que no está funcionando bien dentro de ti y debes averiguar qué es, porque si no lo haces, el problema no se va a solucionar solo, y lo más probable, incluso, es que vaya a peor.
Lo primero que podrías hacer para empezar a escuchar atentamente a tu cuerpo, es llevar un registro de alimentos. Consiste en ir anotando todo lo que vas comiendo a lo largo del día, en qué horario, de qué manera (muchas veces nuestro cuerpo no es capaz de asimilar los nutrientes del alimento porque estamos comiendo haciendo más cosas a la vez y no masticamos o porque tenemos prisa y engullimos) y cómo te ha sentando (cómo es tu digestión y si trae alguna consecuencia posterior). Seguramente, ya solo con esto, descubras que hay algún patrón común que se va repitiendo y que, si lo cambias, sientas algún alivio.
Esto no es necesario que lo hagas por mucho tiempo, pero el hacerlo durante una temporada, te ayuda a tomar conciencia de cómo te alimentas (no solo del tipo de comida que eliges, sino también acerca de tu actitud frente al alimento) y de cómo le sienta a tu cuerpo. Este ejercicio es muy beneficioso a la larga, ya que te ayuda a estar más presente y a saber escuchar a tu cuerpo, de manera natural.
Claves para tener una buena salud.
Una vez que aprendemos a escuchar nuestro cuerpo, ya somos más capaces de identificar qué le pasa y cuáles son sus necesidades, es decir, qué cosas le sientan bien y cuáles no tanto. Y como te he comentado antes, no solo me refiero al tipo de alimentos, sino también a tipos de cocción, cantidades, horarios de comidas, actitud ante el alimento… que como bien te imaginas, todo eso depende de tu constitución base, tu dosha.
Y a medida que vamos dándole todo aquello que necesita y eliminando todo aquello que le perjudica, todo va cambiando a mejor. Es tan sencillo como eso… ¡esa es la clave para tener una buena salud!
Los dos objetivos que hay que conseguir son:
- Aumentar la capacidad de digerir, el llamado fuego digestivo, para que seas capaz de asimilar todos los nutrientes que te han aportado los alimentos.
- Activar metabolismo, para que nuestro cuerpo pueda desarrollar todas las funciones necesarias para mantener la salud.
Recomendaciones para poder tener una buena salud.
Aquí te enumero unas recomendaciones que te ayudarán a aumentar tu capacidad digestiva:
- Empieza el día con el raspado de lengua. Si aún no sabes por qué, aquí te cuento sus beneficios: https://feeleat.es/rasparlengua/
- Aliméntate según tu constitución, para ser capaz de mantenerte en equilibrio. En el caso de que tengas una patología que tratar, lo ideal sería que vinieras a verme para que puedas recuperar tu armonía innata. Puedes hacerlo aquí: https://feeleat.es/contacto/
- Ajusta tu vida y tu alimentación a los ciclos que va marcando la naturaleza (diarios, estacionales y vitales), tal y como te conté en: https://feeleat.es/doshas-y-ciclos-vida/
- Come conscientemente, prestando atención al alimento y masticándolo bien.
- Lo ideal es que no te llenes completamente.
- Inicia tus comidas con una rajita de jengibre fresco con sal.
- Termina las comidas con el sabor astringente. Puede ser una infusión de menta, comino o hinojo.
La manera de activar metabolismo es con el masaje diario, eso estimula nuestro organismo para que todo fluya como debe. Además, lo ideal sería que, al menos, una vez al mes te dieras uno con más profundidad, pudiendo ser:
- El masaje abhyanga (https://feeleat.es/abhyanga/), que te ayuda a armonizarte.
- El masaje udvartana, si lo que tienes es que reducir peso, grasa corporal o algún problema metabólico (https://feeleat.es/udvartana/)
¿Te apetece probar alguno de los dos? ¡No dudes en contactarme!
Pero si quieres:
- conocer mejor Ayurveda para así ser capaz de entender mejor el cómo eres y por qué te comportas como lo haces.
- Saber cómo debes aplicar todo esto que te he contado en el día a día.
- Unirte al reto de 5 días a base de kichadi (https://feeleat.es/kichadi/), para ayudar a que tu organismo empiece a equilibrarse…
Apúntate al taller + reto “Reconecta con la naturaleza y con tu esencia vital” que doy este sábado 18, en Ecoescuentro (Majadahonda). Tan solo les tienes contactar en: https://ecoencuentro.es/contacto/
¡Te espero!


