El ghee u oro líquido es uno de los alimentos más preciados en Ayurveda por sus innumerables propiedades terapéuticas y promotoras de la salud.
Es una mantequilla purificada que obtenemos, en un proceso de cocción, tras eliminar las proteínas y el agua y quedándonos solo con la grasa del lácteo. El producto resultante tiene un gran poder curativo. Se puede tomar internamente o aplicar externamente sobre la piel y está considerado como uno de los mejores alimentos para apaciguar Pitta y Vata. Kapha lo puede tomar con mucha moderación.
Ayurveda considera que el ghee es la fuente de grasa comestible más saludable por sus innumerables propiedades:
- Retrasa el envejecimiento, nutriendo órganos y tejidos, con lo que promueve la longevidad.
- Incrementa nuestra capacidad de digerir, el fuego digestivo (agni).
- Mejora la absorción y la asimilación de nutrientes.
- Nutre Ojas, la esencia sutil de todos los tejidos del cuerpo (dhatus), y por tanto el sistema inmune y reproductivo.
- No incrementa el colesterol, tomado con moderación.
- Mejora la memoria.
- Fortalece el sistema nervioso y al cerebro.
- Lubrica articulaciones y tejidos conectivos, reduciendo la rigidez corporal.
- Alivia problemas oculares como conjuntivitis, picor, vista cansada. Aplicado en forma de netra basti.
- Frena las quemaduras y evita ampollas, sí lo aplicamos externamente en el acto.
- Da lustre a la piel.
El ghee se puede usar tal cual o mezclado junto a diferentes hierbas o preparaciones para utilizarlo como vehículo en el tratamiento de diversos trastornos. En esos casos se le conoce como ghee medicado.
Ingredientes:
- Mantequilla ecológica sin sal.
La cantidad de mantequilla que necesitas, depende de la cantidad de ghee que quieres hacer.
Modo de preparación:
- Cortamos la mantequilla ecológica y sin sal en dados grandes y la colocamos en un cazo al fuego. Podemos empezar con el fuego medio/alto hasta que empieza a derretirse y a diferenciarse una parte blanca. En ese momento tenemos que bajar el fuego a temperatura media/baja.
- Removemos continuamente con un cuchara de madera para que se caliente homogéneamente, hasta que la capa blanca va desapareciendo y empieza a verse el fondo del cazo.
- Cuando los posos blancos comiencen a hundirse bajaremos el fuego al mínimo y continuaremos removiendo, cuidando que no se queme el fondo.
- Los posos del fondo empezarán a dorarse, y en ese momento es importante estar atentos y apagar el fuego antes de que se quemen.
- Comprobamos que está bien hecho cogiendo un poco con un algodón y quemándolo. Si no chispea es que no contiene agua y por tanto está perfecto.
- Colamos el contenido con un colador fino junto a una tela de algodón y lo vertemos en un bote de cristal.
- El Ghee elaborado correctamente debe tener un olor agradable y no debe contener agua.
Conservación:
- Lo mantendremos a temperatura ambiente en un lugar alejado de la luz.
- No debemos meterlo en el frigorífico porque puede coger humedad.
¡Siente lo que te nutre y te enriquece!
Feel eat.
Muchas gracias por la receta, estuve mirando otras y ninguna lo explica tan bien. El truco del algodón es genial!
¡Ana, me alegra muchísimo que te haya gustado la receta!
Y espero que disfrutes del ghee casero a partir de ahora. Un abrazo fuerte